Santiago Fontenla.- Lamiae Abassi, de la Asociación de Ex MENAs, ha criticado en una entrevista concedida a Catalunya Radio, la política de agrupar menores extranjeros no acompañados en un mismo centro, sin que tengan relación con jóvenes de otras nacionalidades, además de asegurar que este colectivo apenas recibe ayudas personalizadas para solventar la dura historia personal que arrastran.

Abassi considera que se trata de una política racista y que no ayuda a culminar la fase de integración de los mismos. “Hay que pensar que lo primero que buscan es ayuda, que se les escuche y se les pueda entender. Existe un error de base que pasa por realizar para todos los Menas el mismo circuito de explicaciones y de información cuando cada uno de ellos arrastran distintas historias personales”.

En este sentido, la miembro de la Asociación de ex Menas defiende que la mejor ayuda es detectar a tiempo el problema: “No se puede detectar los problemas si las respuestas que reciben por parte de la sociedad se traducen en rechazo y desconfianza”.

Una desconfianza que también se traslada por parte de las autoridades. Abassi desvela que en los centros no conviven personas de distintas nacionalidades. “La mayoría son del mismo origen y de esta manera la integración es muy difícil. Creo que no se mezclan por racismo, miedo y prejuicios”, puntualiza.