Conmoción en un pueblo de apenas cuatrocientos habitantes situado en el interior de la provincia de Valencia. La Guardia Civil investiga el fallecimiento del exteniente de alcalde del municipio de Villargordo del Cabriel Juan Carlos Martínez, quien presentó una moción de censura la semana pasada y cuyo cuerpo ha sido hallado este jueves en las inmediaciones de esta localidad.

La principal hipótesis del fallecimiento, dadas las circunstancias en las que se ha hallado el cuerpo y el hecho de que el fallecido había conducido hasta el lugar, es que se trate de un suicidio, han apuntado fuentes conocedoras de los hechos.

Este edil, el único socialista que quedaba de los dos que obtuvo el PSPV-PSOE en los últimos comicios -la otra se pasó a los no adscritos hace tres semanas-, fue apartado del grupo municipal tras conocerse que había presentado, el pasado miércoles, una moción de censura a la alcaldesa Carmen Suárez (de Somos Villargordo) con el apoyo de tres ediles del PP.

Esta moción de censura, explicó la alcaldesa a EFE, no se tramitará porque requeriría una mayoría más amplia, al formar parte del equipo de Gobierno el edil que la promovía.

Para que prosperase la moción sería necesario el apoyo de cinco de los siete ediles que conforman el pleno municipal (dos de Somos, dos exsocialistas que formaban parte de los no adscritos y tres del PP).

Tras conocer la moción contra ella, la alcaldesa decidió retirar las competencias a Juan Carlos Martínez por “haber quebrado el pacto de legislatura, poner su voto al servicio de la oposición y pretender atribuirse unos derechos políticos con las respectivas ventajas económicas vinculadas al cargo”.

En el texto de la moción de censura, Juan Carlos Martínez, justificó la necesidad del cambio de Gobierno local en “el deterioro de la situación política, el desgobierno municipal y la falta de concreción para la realización de un proyecto viable y de futuro”.

La agrupación socialista de Utiel-Requena remitió el pasado jueves un escrito al Ayuntamiento de Villargordo en el que informaba de que su edil había incurrido en una falta «muy grave» de los estatutos del partido, motivo por el cual se le apartaba del grupo municipal socialista a todos los efectos.