Connect with us

Opinión

Pablo Echenique al desnudo

Avatar

Published

on

Pablo Echenique
¡Comparte esta publicación!

Guadalupe Sánchez.- El 12 de diciembre de 1985, el diario El País publicaba que dos jóvenes de Leganés confesaron haber matado a otro para vengar una violación. El asesinado era Manuel López Rodríguez, de 24 años. Su cadáver descompuesto lo encontraron en un pozo, al que lo habían arrojado tres meses antes. Durante esos días de zozobra en los que Manuel estaba desaparecido, sus padres recibieron varias veces la visita en casa de una amiga del muchacho, Pilar Baeza, que les preguntaba por su hijo y hasta se quedaba de vez en cuando a comer.

Los padres de Manuel no podían entonces imaginar que lo habían matado y que aquella joven no sólo lo sabía, sino que también había participado en el crimen. Ella no solamente facilitó a su novio y a un amigo de éste, conocidos como el Zapatero y el Carnicero, la escopeta con la que dispararon a Manuel a bocajarro tras llevarlo engañado a las proximidades del pozo, sino también el móvil para el asesinato: aseguró a su novio que había quedado embarazada de Manuel porque éste la había violado. Al menos, es lo que los tres implicados refirieron a la policía, porque de ese embarazo nunca más se supo.

Respecto al arma homicida, jamás se encontró: era una escopeta que el padre de Pilar estaba reparando en la armería que regentaba. Ella la sustrajo y la devolvió antes de que se volviera a abrir la tienda a la mañana siguiente y se la llevase su dueño. Un plan digno de un criminal experimentado.

Tras un largo juicio en el que los padres de Manuel se llegaron a gastar millones de pesetas, Pilar fue condenada a treinta años de prisión. El Tribunal Supremo sentenció que no existían pruebas de que la violación hubiera existido. A pesar de todo, apenas cumplió siete años de condena.

Advertisement

Cuando el pasado año se hizo pública la candidatura de Pilar a la Alcaldía de Ávilay se montó un enorme revuelo mediático al conocerse la condena por asesinato, el por entonces novio de Pilar, Manuel García, relató a los medios una historia distinta a la reflejada en la sentencia: manifestó que el crimen lo cometieron en el chalet de los padres de Pilar y que fue ella quien disparó primero a Manuel López, pero que se pactó otra versión de los hechos para salvarla. Dijo que se limitó a creer la palabra de Pilar cuando ella le juró que Manolo la había violado quince días antes. Después de tantos años, ya no está seguro y se muestra arrepentido.

Tras leer los detalles de todo lo acontecido en este truculento suceso: ¿se atreverían ustedes a asegurar, sin ningún tipo de paliativos, que Manuel López –Manolo– violó a Pilar? Difícilmente. Algo tan irresponsable y nauseabundo sólo está al alcance de muy pocos, aunque tristemente muchos de ellos ocupen hoy puestos muy bien remunerados con responsabilidades públicas, como Pablo Echenique.

Cuando era portavoz de Podemos, el actual diputado de la formación morada intentó zanjar la polémica sobre la alcaldable abulense manifestando que: “hablamos de hechos que tuvieron lugar hace 35 años, que se refieren a una mujer que fue violada”.

Unos días después de la rueda de Prensa de Echenique, el secretario de comunicación de Podemos, Juanma del Olmo publicó el siguiente tweet: “Abrazo a Pilar Baeza de PODEMOS Ávila. Hace 35 años fue víctima de una violación. Su novio entonces disparó al hombre que la violó. Ella fue condenada por complicidad y pagó su deuda con la sociedad. El señalamiento iniciado por Pedro J. es un ataque a los derechos fundamentales”.

Ayer se hizo público que, en contra del criterio de Ministerio Fiscal encabezado por Dolores Delgado, la magistrada del juzgado de Instrucción nº 8 ha condenado a Echenique y a Del Olmo por intromisión ilegítima en el honor del asesinado y al pago de una indemnización de 80.000 euros a la familia del fallecido.

Advertisement

Cuántas tropelías contra la presunción de inocencia y el honor de muchos hombres está cometiendo la izquierda amparándose en ella y en nombre del feminismo.

La sentencia no es firme y contra la misma cabe recurso. Pero es un buen recordatorio de que ningún derecho fundamental es absoluto, ni siquiera la libertad de expresión. Cuántas tropelías contra la presunción de inocencia y el honor de muchos hombres está cometiendo la izquierda amparándose en ella y en nombre del feminismo. A este respecto, me veo obligada a recordar los tweets y declaraciones del presidente Pedro Sánchez, la vicepresidenta Carmen Calvo, la ministra de Igualdad Irene Montero o la delegada del Gobierno contra la violencia de género Victoria Rosell, confirmando asesinatos de mujeres a manos de su marido o pareja sentimental apenas publicarse el suceso, aunque finalmente resultó que no tuvieron ninguna implicación. El Gobierno dictando sentencias sin más evidencia que un titular mediático y sin más juicio que el que le conviene a su interés político. Prejuzgando la autoría de crímenes y los motivos del presunto delincuente para justificar sus chiringuitos políticos y sus sueldos: ¡qué vergüenza, señores, qué vergüenza!

Han plagado las instituciones de personas que han reemplazado el odio hacia el burgués por el odio hacia los hombres. En la trayectoria profesional de muchos de ellos destacan declaraciones que pretenden la criminalización de los hombres como colectivo por una mera condición biológica. Siempre me gusta recordar aquella entrevista de la anterior delegada de Violencia de Género, Pilar Llop, afirmando que: “Una democracia en la que la mitad de la población -varones- vierte violencia sobre la otra mitad -mujeres- no es democracia”. Está describiendo un derecho penal de autor por razón de género, nada menos. Es difícil concebir que alguien que defiende estos peligrosos postulados acientíficos haya podido ser juez. Pero que ahora sea la actual presidenta del Senado a propuesta del grupo socialista es, francamente, deprimente. La cuarta autoridad del Estado, que ahí es nada.

Pablo Echenique, que podríamos decir que no es que hable, sino que perpetra palabras, no podía faltar en este selecto club

Pablo Echenique, que podríamos decir que no es que hable, sino que perpetra palabras, no podía faltar en este selecto club. Tildar a un hombre de violador, acosador o maltratador está intrínsecamente unido a la doctrina feminista de su partido, ya que a muchos les van los euros en ello. Pero la sentencia de la magistrada de Leganés lo ha dejado en cueros, metafóricamente hablando, y posiblemente con sus bolsillos mucho más ligeros.

Resulta muy significativo el regocijo general, no sólo porque la toxicidad discursiva de Echenique lo convierta en alguien francamente antipático, sino porque lo de justificar el asesinato cometido por su candidata a la alcaldía de Ávila en que la habían violado, a sabiendas de que no es cierto, no es algo nuevo: va de la mano del despido del exabogado de Podemos aduciendo como motivo el acoso sexual.

Cómo olvidar aquello que dijo el actual vicepresidente Pablo Iglesias, cuando aún llevaba cola y no moño:  “se trata de un caso de acoso sexual muy grave que ustedes conocen”. Otra acusación que también ha resultado ser falsa, por cierto. Y es que Unidas Podemos ha patentado ya la difamación de género y va camino de ostentar el récord de instrumentalizar políticamente las denuncias por violencia de género. No rechazan la existencia de denuncias falsas por convicción, sino porque en el fondo sería como negarse a sí mismos.

Advertisement

De verdad, no se engañen, ni a Echenique ni a ninguno de todos éstos la realidad de las mujeres maltratadas, violadas o asesinadas les preocupa lo más mínimo. Usan estos dramas para aferrarse a sus poltronas políticas y asegurarse un sueldo que jamás les pagarían en el sector privado. No valen para nada, salvo para hacer daño a inocentes como Manuel, desacreditar las instituciones democráticas que ocupan y socavar el estado de Derecho. Aunque ése sea en el fondo su objetivo, para qué mentir.

Advertisement
Click para comentar

Escriba una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Opinión

Hipótesis sobre los resultados de las elecciones catalanas. Por Ernesto Milá

Ernesto Milá

Published

on

¡Comparte esta publicación!

No está muy claro cuál va a ser la repercusión de las elecciones catalanas, ni siquiera los resultados. Se ignora, por el momento, el efecto que pueden tener medidas como la amnistía, los casos de corrupción y cómo reaccionará el electorado nacionalista. Ni siquiera en la derecha están claros los resultados. Todo empezará a verse más claro cuando se sepa el resultado de las elecciones vascas (que albergan menos incertidumbres) y cuando se deshinchen los globos mediáticos sobre el “Caso PSOE” y la respuesta socialista activando el ventilador de la corrupción (esto es, cuando se vayan conociendo los alcances jurídicos y penales de ambos casos). Al mismo tiempo, ni siquiera están claros algunos candidatos que se presentarán (empezando por Puigdemont), ni mucho menos son creíbles los sondeos publicados. Así pues, vamos a intentar contemplar distintas hipótesis.

ILLA: ¿SUBIRÁ O BAJARÁ? YA NADA DEPENDE DE ÉL NI DE SU CAMPAÑA

En nuestra opinión Illa es un candidato “tocado” por sus propios errores durante la pandemia (él mismo dijo que al ser nombrado “ministro de sanidad”, no tenía ni idea de sanidad y nadie esperaba que se produjera la llamada “pandemia”) que no afectan solamente al manejo alegre de fondos del ministerio que se perdieron en mascarillas inservibles, tests igualmente falsos y material caro, malo y que se destruyó sin exigir devoluciones. Lo peor no es esto: esto sería, en el peor de los casos, incapacidad para gestionar un ministerio (algo previsible en un tipo que carecía por completo de experiencia en gestión y cuyo modesto título de “licenciado en filosofía” no le ayudaba en nada). Lo peor es que durante la gestión de Illa murió gente. Entonces, cuando el miedo atenazaba a la sociedad española, estábamos poco dispuestos a creer que la mayoría de las muertes se debían a la “mala praxis médica” recomendada por la Organización Mundial de la Salud, pero, desde entonces, las voces que ya lo advirtieron en aquel momento, se han convertido en un clamor. Y no, no somos negacionistas: existió pandemia y existió el virus… pero el mayor crimen fue recomendar unos protocolos que, en lugar de erradicar el virus cuando aún se podía, tendían a “hundirlo” en los pulmones de donde ya era imposible erradicarlo. Esa es la tesis que cada día gana más fuerza y que, en su momento, pocos médicos se atrevieron a denunciar.

Aquella mala gestión, presentada por Sánchez como un “gran éxito”, fue suficiente para desplazar a Illa al frente del PSC catalán en donde sigue. Ahora queda saber, si en los dos meses y medio que quedan hasta las elecciones, surgirán nuevas informaciones, tanto sobre el descontrol que existía en el ministerio de sanidad durante su gestión, como el error de aplicar protocolos contraproducentes en el trato de la enfermedad. El futuro de Illa dependerá, en gran medida, de esto, pero, además se le junta otro problema.

Advertisement

EL PRECIO DE LA AMNISTÍA QUE PAGARÁN LOS SOCIALISTAS

El electorado socialista que permanezca fiel al PSC deberá de aceptar la versión oficial pedrosanchista sobre la oportunidad de conceder la amnistía: que se trató de una medida para poner el contador a cero, limpiar los errores del pasado, perdonar delitos de todo tipo a cambio de garantizar la convivencia. Pero este razonamiento es débil por dos motivos: el primero de todos, que el contador no está a cero. En realidad, los independentistas, ahora, están más fuertes que antes: consideran que no hicieron nada ilegal y, han repetido, por activo y por pasiva, que volverían a hacerlo. Así pues, los propios independentistas se encargan de desmentir y desmontar el razonamiento de quien les ha indultado. El segundo motivo es que resulta demasiado evidente que Sánchez sigue en el poder gracias a los 7 votos de Junts y que los ha obtenido para alcanzar una escuálida mayoría, obteniendo a cambio, solamente, la seguridad de mantenerse unos meses más en el poder.

La maniobra ha sido urdida por Sánchez, pero su virrey en Cataluña es el que tendrá que dar la cara ante su electorado. La duda es si una cuarta parte de los votos que obtuvo el PSC en las elecciones generales, seguirá pensando que el PSC era el muro más seguro contra el independentismo, seguirá fiel a la sigla o se habrá convencido de que el PSC no solamente no es el “muro”, sino que es el ariete: esto es, el muñeco que, manejado por el independentismo, consigue abatir, mucho mejor que ellos mismos, las resistencias de la unidad del Estado. Porque esto es lo que viene produciéndose desde Pascual Maragall, el hombre, con el cerebro ya desbaratado por la enfermedad, que se obstinó en la reforma del Estatuto (cuando no existía demanda social alguna), pacto con ERC y dio origen al problema que actualmente sigue vivo (y no lo estaba a principios del milenio, salvo en minorías juveniles muy radicalizadas).

LO IMPORTANTE ES QUIEN SUPERARÁ A QUIEN: ERC A JUNTS O VICEVERSA

El espacio independentista es, literalmente, caótico: ni siquiera dentro de las dos grandes formaciones (ERC y Junts) se está de acuerdo en lo que se pretende y mucho menos en cómo conseguirlo. Una nebulosa se percibe en ambos partidos en sus propuestas. Agitan todavía el tema de la independencia, pero da la sensación de que lo único que les interesa es liquidar el asunto, consiguiendo un “referéndum de autodeterminación” (“no vinculante” para unos y “vinculante” para otros). A diferencia de en 2007, los más lúcidos, dan por sentado que ese referéndum daría un resultado negativo… pero, al menos, podrán ´decir a su electorado, “lo hemos intentado”. Pocos son -pocos de los que tienen neuronas y las utilizan- los que piensan que la independencia de Cataluña es posible en las actuales circunstancias. El fracaso del “procés”, les ha hecho meditar… aunque no tengan el valor de afirmarlo públicamente, porque, como se sabe, el fin de un partido nacionalista/independentista es la independencia y, si esta no se puede conseguir, ¿para qué existe la sigla?

Advertisement

No vamos a presenciar un debate entre dos programas políticos realistas, sino entre un programa “posibilista” (el de ERC) que quiere seguir detentando las riendas de la gencat, y un programa “agresivo” (el de Junts) que quiere restituir en la presidencia a Puigdemont. Los dos se declaran “indepes” y quieren convencer a su electorado de que lo siguen siendo, pero, en realidad, los dos, lo que quieren es tener las más amplias parcelas de poder para alimentar a sus cuadros. Eso es todo. La duda de si se producirá el sorpasso de Junts a ERC o si ERC mantendrá la hegemonía en el jardín indepe, es lo único que está en juego. ¿Referéndum? Ambos partidos han llegado a la conclusión de que lo mejor es… “jugar y perder”.

 

LAS FUERZAS NO INDEPENDENTISTAS

Teniendo en cuenta que el PSC juega la carta del equívoco desde la misma fusión de las distintas ramas del socialismo catalán en la transición, y su postura “federalista” es tan inviable como la “independentista”, el electorado que todavía conserva cierto sentido de la realidad nacional e internacional, está ubicado fuera de los márgenes del ambiguo socialismo catalán. En efecto, nos estamos refiriendo al PP, a Vox y a los restos de Ciudadanos. El electorado no independentista y “españolista” o “estatalista”, desearía que estas formaciones se presentaran bajo una misma etiqueta. De hecho, la lógica política implica que así debiera ser y que el poder de atracción de un polo así concebido sería el tercer actor político en Cataluña (tras el bloque independentista y tras el PSC). ¿O hay que recordar que Ciutadans, fue el partido más votado en las elecciones regionales de 2017? Y su programa se reducía a un solo punto: “no al nacionalismo – no al independentismo”.

Por otra parte, la derecha no ha extraído conclusiones de su derrota en las elecciones generales de 2023 que se debió a presentarse dividida en dos opciones, lo que permitió que se perdieran “restos” en beneficio del PSOE y en aplicación de la Ley d’Hondt. Cada uno de los dos partidos cree que podrá quedar “por delante” del otro en Cataluña. Pero, lo que está demasiado claro, es que la división de las fuerzas “estatalistas” seguirá siendo el factor que las suma en la irrelevancia en la política regional.

Advertisement

Si el PP queda por delante de Vox, su dirección podrá alardear de “éxito electoral” (lo más probable es que aumente el número de votos, lo que no está tan claro es de dónde procederán esos votos, si de Vox o de sectores decepcionados con el PSC) y reforzar el previsible avance que obtenga en las elecciones vascas, en donde las últimas encuestas dan una pérdida notable de votos al PSOE (en beneficio, por una parte, de Bildu y, por otra, del PP). Para Vox, quedar por delante del PP supondría mantenerse como una opción tentadora para los votantes de este último partido que cada vez más quieren posiciones más claras y menos contemporizadoras.

De todas formas, el gran error y lo que limitará las posibilidades y los resultados “estatalistas” es su persistencia en desconocer que solamente un “programa único” podría llevarlos a competir con los dos otros bloques de la política catalana.

LO QUE SERÍA DESEABLE PARA EL ESTADO

Cataluña es la única reserva importante de votos que le queda a Pedro Sánchez. Sean cuales sean sus resultados en el País Vasco, aquella comunidad no puede aportar numéricamente gran cosa al PSOE. Si Sánchez consigue detener la sangría de votos socialistas catalanes, corre el riesgo de estabilizar su situación (hoy extremadamente precaria). Pero, para eso, haría falta que Illa obtuviera un buen resultado y que esto le permitiera entrar en el gobierno de la gencat, junto a ERC (en caso de que este último, como es seguro, no obtuviera una mayoría suficiente para gobernar en solitario).

Desde el punto de vista del “interés nacional” y de la “gobernabilidad del Estado”, una derrota socialista en Cataluña o, al menos, un descenso significativo de votos (al que se uniría en apenas un mes, una derrota previsible y sin paliativos de toda la izquierda europea en las elecciones de la Unión Europea), es deseable, necesaria y supondría otro golpe de piqueta para la existencia de la sigla “PSOE”.

Advertisement

Desde que se inició el “procés”, siempre hemos sostenido que la independencia de Cataluña era completamente imposible, además de inviable. Cada vez estamos más convencidos de esta afirmación. La situación catalana está tan degradada, especialmente en materia de orden público y seguridad ciudadana que, aunque la temática no ocupa el primer plano en los programas de los partidos, está ahí para quien verla: un tercio de la población catalana ha nacido fuera de España o son hijos de extranjeros; ya existen zonas en Cataluña en donde la policía ha sido expulsada y diariamente se repiten incidentes cuando la policía entra en barrios de Salou, de Tarrasa o incluso en zonas de la propia Ciudad Condal, las prisiones catalanas están descontroladas (el asesinato de una cocinera y las protestas de los funcionarios han exteriorizado la situación de control que ejercen los presos procedentes del Magreb), Barcelona ya es considerada como una de las ciudades más peligrosas del mundo… Y todo esto con la policía nacional y la Guardia Civil, literalmente expulsadas del territorio catalán y con una policía autonómica desbordada y sin posibilidades de combatir a la delincuencia. A esto se suman los problemas de desindustrialización, gentrificación, la concentración de la mitad de la población catalana en torno a la ciudad de Barcelona, con un campo abandonado a su suerte y un gobierno de la gencat, consciente de todos estos problemas, pero ansioso de comprar la paz étnico-social mediante subsidios y seguir creyendo que con un certificado de catalán, los casi dos millones de inmigrantes e hijos de inmigrantes ya están integrados.

Sin olvidar que Cataluña tiene la tasa de natalidad más baja de todo el Estado (y el Estado Español una de las más bajas de todo el mundo)… ¿Quién iba a decir que después de 45 años de “Generalitat de Catalunya” la propia identidad catalana estaría en trance de desaparecer? Por que ese es el problema real y de fondo al que se enfrenta la sociedad catalana. Por mucho que se empeñe la gencat en llamar al engendro creado “Cataluña multicultural”, lo cierto es que, si es “multicultural” no es “catalana”. Ni siquiera europea. Por eso, siempre hemos sostenido que una Cataluña independiente tendría muchas más posibilidades de integrarse en la Liga Árabe que en la UE… Lo dijimos y lo mantenemos.

 

Ernesto Milá.

Advertisement
Continuar leyendo
Advertisement
Economía2 horas ago

Cómo hacer una tasación de vivienda?

¡Comparte esta publicación! ¿Sabías que una correcta tasación de una vivienda puede marcar la diferencia entre reducir gastos innecesarios y...

España6 horas ago

“Alvise” Pérez lo vuelve a hacer: el analista destapa un nuevo caso de corrupción en el PSOE

¡Comparte esta publicación! En las soleadas y acomodadas calles de Sotogrande, el chiringuito Gigi’s Beach era más que un mero...

España1 día ago

La canalla traidora y nacionalista gallega del PP de Feijóo: “Homenaje” al desgraciado de Castelao, que justificaba el matar y torturar “españoles”

¡Comparte esta publicación! EN LA TOMA DE POSESIÓN COMO PRESIDENTE DE LA XUNTA Feijoo y Rueda rinden homenaje a Castelao,...

España3 días ago

Corrupción al día: las noticias sin censura, por Alvise Pérez

¡Comparte esta publicación! Las noticias de verdad: ☀️1. España pierde otro juicio sobre la retirada retroactiva de las prima renovables...

Una mujer sostiene un pequeño frasco etiquetado con una etiqueta de "Vacuna contra el Coronavirus COVID-19" y una jeringa médica en esta ilustración tomada el 30 de octubre de 2020. (REUTERS/Dado Ruvic/Foto de archivo) Una mujer sostiene un pequeño frasco etiquetado con una etiqueta de "Vacuna contra el Coronavirus COVID-19" y una jeringa médica en esta ilustración tomada el 30 de octubre de 2020. (REUTERS/Dado Ruvic/Foto de archivo)
España5 días ago

INTRIGANTES NOTICIAS sobre la vacuna de Astra-Zeneca difundidas por un farmacéutico colegiado

¡Comparte esta publicación! D. Guillermo Martín, desasnando españoles. Este hombre merece una estatua.   

España1 semana ago

¡¡Alvise Pérez al Parlamento Europeo!! La mejor manera de romper un sistema es desde dentro: ¡Adelante Alvise, por España!

¡Comparte esta publicación!   Que Luis Pérez, conocido como “Alvise” Pérez en las redes, se presente a las Elecciones Europeas...

Advertisement Enter ad code here